En el vertiginoso mundo digital actual, la competencia entre agencias es feroz y la inteligencia artificial avanza a pasos agigantados, asumiendo cada vez más responsabilidades que antes recaían en freelancers. Ante este panorama, surge una figura esencial para empresas que buscan potenciar su presencia online sin incurrir en grandes costes: el CTO as a Service puede ser la clave para digitalizar tu PYME.
¿Qué es un CTO as a Service y por qué lo necesitas para digitalizar tu PYME?
Imagina que tu empresa se dedica a la fabricación de bicicletas de alta calidad, pero careces del conocimiento digital necesario para dar a conocer tu producto y llegar a tu público. Tradicionalmente, la solución habría sido acudir a una agencia de marketing digital, con costes que oscilan entre los 4.000 y 15.000 euros por el desarrollo web y su integración con tus herramientas.
Sin embargo, existe una alternativa mucho más inteligente y rentable: el CTO as a Service o CTO externo. Esta figura, ya abordada en nuestro blog, te permite contar con el conocimiento tecnológico necesario para impulsar tu negocio digitalmente. Pero, ¿y si llevamos esta idea un paso más allá? Podemos hablar de contratar este CTO as a Service, pero como un partner.
El CTO as a Service como partner digital: la evolución de la colaboración
Un partner digital, como Digital Partner AI, es un socio que se vincula a tu negocio, compartiendo el riesgo de emprender y asumiendo la parte digital de tu empresa. Esta modalidad es especialmente atractiva para pequeñas y medianas empresas (PYMES) y startups en España. Para que esta colaboración sea exitosa, hay tres pilares fundamentales a considerar:
1. Confianza: la base del éxito para digitalizar tu PYME
El primer paso y el más crucial es la confianza. Si te asocias con un partner digital, debes confiar plenamente en su expertise. Si te limitas a imponer tus viejos hábitos y vicios, es probable que no logres los resultados esperados en el ámbito digital. La confianza permite al partner trabajar con libertad y eficiencia, llevando vuestra asociación a buen puerto.
2. Vende tu proyecto: hazlo irresistible para tu socio
Un partner digital no busca una ganancia económica inmediata, sino que invierte en proyectos ganadores que generen beneficios a largo plazo. Por ello, es vital que tu proyecto sea atractivo, no solo a nivel económico, sino también en términos de gestión, operativa y comunicación. Facilita la integración y adáptate al entorno digital, adoptando nuevas herramientas de comunicación y trabajo que se integren en vuestro flujo.
3. Plan a largo plazo: minimiza riesgos y maximiza ganancias
Una de las grandes ventajas de colaborar con un partner digital es la posibilidad de minimizar el coste inicial y compartir los beneficios. Si no estás dispuesto a ceder una parte significativa de tu empresa (un 20%, 30% o 40%), puedes optar por un modelo de coste inicial reducido y participación en las ganancias si el proyecto prospera.
Por ejemplo, mientras que el desarrollo de una web completa con e-commerce y gestión SEO puede costar entre 7.000 y 8.000 euros en una agencia digital en un plazo de año y medio a dos años, con un socio digital como Digital Partner AI, el coste inicial puede ser de cero euros. Incluso si tu proyecto no está completamente maduro, puedes acordar un pago inicial mínimo (por ejemplo, 300 euros), una cuota anual para mantenimiento (unos 250 euros) y compartir un porcentaje de los beneficios (por ejemplo, un 10%) desde el inicio del contrato. Los beneficios compartidos pueden ser sobre el total de la empresa o solo sobre el canal online, según el modelo que elijas.
Beneficios para digitalizar tu PYME
La principal diferencia y ventaja de esta modalidad de partnership es la drástica reducción del riesgo y el coste para tu empresa. La digitalización se vuelve mucho más accesible para pequeñas empresas, al contar con partners digitales maduros y con profundo conocimiento del sector.
En resumen, el modelo de CTO as a Service como partner digital ofrece una vía inteligente y eficiente para que tu PYME dé el salto digital, minimizando la inversión y maximizando las posibilidades de éxito a largo plazo.